domingo, 9 de julio de 2023

Wham!, el documental: La misión de una amistad verdadera

Netflix acaba de estrenar el documental Wham!, que cuenta la historia del dúo pop que integraron George Michael y Andrew Ridgeley. Si bien sigue las directrices básicas de un documental musical, va dejando reflexiones sobre cómo la amistad es puesta en juego cuando el éxito, la fama y el dinero van metiendo su cola en la relación de dos jóvenes que crecieron juntos para hacer realidad el mismo sueño.

 

A inicios de los ’80, cuando Inglaterra iba dejando atrás la estela de destrucción y fealdad del punk, dos jóvenes británicos decidieron tomar al mundo por sorpresa. Para Andrew Ridgeley y Georgios Panayiotou (George Michael), era un sueño el ser famosos a través de la música, amor que compartían desde los 11 años cuando se convirtieron en mejores amigos de la Bushey Meads High School, en Hertfordshire. De ese hilo se toma Chris Smith para ahondar en una carrera vertiginosa, que solo duró cuatro años y que lanzó al estrellato a uno de los más prolíficos compositores del siglo XX. Con una mixtura entre rap, disco, pop y letras de crítica social contra el thatcherismo, Wham! se ganó un espacio en la televisión británica y en la nueva escena musical que nacía a punta de  buenos ritmos, pelo largo, color y sonrisas brillantes; si bien esto fue parte del siguiente estilo preponderante (la New Wave), el talento de George y Andrew para escribir, componer y producir queda en evidencia en el metraje pero, junto con esto, va develándose el mutuo apoyo que se prestaban dentro de esta vorágine; Andrew ayudó al nervioso e inseguro George a encontrar su voz musical en esa juventud , reconociendo que sus direcciones compositivas eran diferentes y que llegaría el momento en que cada uno iba a querer seguir creciendo pero en su propio lado.  

Una de las narrativas clave del documental será la liberación de identidad de George, quien no sabía cómo transitar hacia el reconocimiento público de su homosexualidad. El film también indaga en el panorama musical de los ’80, en el pop y la novedad que significó la propuesta de este dúo.

 


Chris Smith se planteó el objetivo de responder estas preguntas a través de imágenes de archivo y entrevistas de audio con Andrew y George (quien grabó sus pensamientos antes de morir en 2016). El resultado es un retrato optimista y afectuoso de dos niños que lograron su sueño de adolescentes, apoyándose en cada paso y no dejando que la envidia o terceras personas cortaran el hilo que los unía desde niños; una de las partes más conmovedoras del film, pasa por la forma en que Ridgeley va cediendo protagonismo y de, alguna manera, va impulsando la carrera solista de George, asumiendo que la disolución de Wham! era inevitable, aunque estuvieran en un momento álgido y con mucho caudal creativo por desarrollar; llegó un momento en que George era reconocido como compositor y eso se refleja en la emoción que le produjo haber recibido el Ivor Norvello siendo tan joven, lo cual fue otro indicador de que él estaba listo para encumbrar el vuelo y dejar en el nido a quien había sido su fiel compañero. Finalmente, el resumen del documental es una historia de amistad verdadera en medio del caos del éxito absoluto, haciendo que la trama se vuelva muy interesante incluso para quienes nunca han sido fans del dúo.

Una amistad sincera, trauma oculto y sacrificio, esto es Wham! y su meteórico ascenso, el cual es revisitado con excelente archivo y dos voces que hablan con calma y mesura sobre ese momento de sus vidas; obviamente está la pregunta de si acaso no faltan piezas en esta historia, de si verdaderamente todo ocurrió sin peleas ni recriminaciones, aunque el razonamiento de Ridgeley parece tan sincero y generoso que, en una de esas, esa separación sí estuvo marcada por el cariño verdadero que, al parecer, sí se tuvieron.